Veamos en primer lugar el caso de los productos light, y luego ahondaremos en el asunto de los alimentos integrales.
Primeramente debe quedar clara la definición de alimento light. Se trata de un producto alimenticio al cual se le ha reducido o eliminado alguno de sus componentes calóricos. En consecuencia, los producto light deben contener, para poderse llamar como tal, una reducción de cómo mínimo el 30% de calorías respeto al alimento análogo convencional. Queda patente que los alimentos light tienen menos calorías, por lo que pueden ser usados como soporte en una dieta que busca reducción de peso. En ningún caso, no obstante, podemos afirmar que adelgazan. No hay que olvidar que muchos alimentos light siguen siendo muy calóricos por su naturaleza (mayonesa, patatas fritas, paté, etc.), con lo cual sigue siendo necesario controlar su consumo. La industria alimentaria nos ha brindado la posibilidad de usar los alimentos light, pero en muchas ocasiones son usados incorrectamente. En mi experiencia, he observado que la gente cuando toma alimentos light consume mucha más cantidad que cuando toma el alimento normal. Como ya hemos dicho un alimento light contiene el 30% menos de calorías, pero si consumimos un 50% más de producto creyendo que éstos no tienen calorías o incluso que adelgazan, nos vamos a encontrar que la persona igualmente va a ganar peso. En conclusión podemos decir que los alimentos light son una buena herramienta en la alimentación, pero que hay que vigilar su consumo porqué en ningún caso están carentes de calorías.
Sobre los alimentos integrales ya hablamos largo y tendido en un artículo del blog hace meses. En referencia al tema que tratamos hoy, comentar que los alimentos integrales poseen mayor contenido en fibra, minerales, vitaminas y otras sustancias beneficiosas, pero contienen aproximadamente el mismo número de calorías que sus homólogos refinados, con lo cual podemos negar de inmediato la idea de que adelgazan. Los alimentos integrales son tremendamente beneficiosos par la salud humana, y su alto contenido en fibra pueden producir una sensación de saciedad que puede venir muy bien en planes nutricionales de reducción de peso. Sin embargo, y otra vez desde mi experiencia, vengo observando que las personas cuando consumen alimentos integrales lo hacen en mucha mayor cantidad que cuando consumen la versión no integral, con lo cual es frecuente ver que no consiguen bajar de peso o incluso aumentan.
Con el capítulo de hoy vuelve ha quedar patente que los mitos alimentarios no son inocentadas, son bulos populares que son profundamente aceptados por la población para llegar a un objetivo, y paradójicamente, obtienen el resultado contrario. En este caso hemos podido ver que el creer que los alimentos light e integrales tiene pocas calorías o incluso que adelgazan, hace que la personas consuman mayor cantidad, con lo cual, contradictoriamente, aumentan su consumo energético diario con lo cual pueden verse incluso un aumento de peso.
Visita también otros mitos alimentarios de esta serie: